Una de las cualidades más bonitas de la
amistad verdadera es comprender y ser comprendido. Un amigo es alguien que te da total libertad para ser tú mismo. No camines detrás de mí; no te guiaré. No camines delante de mí; te seguiré. Sólo camina a mi lado y sé mi amigo. La amistad no es algo que se aprenda en la escuela. Pero si no aprendes el significado de la amistad, realmente no has aprendido nada. El deseo de ser
amigos es un trabajo rápido, pero la amistad es una fruta de maduración lenta. No busques al amigo para matar las horas, sino búscale con horas para vivir. Un amigo verdadero es una de las mayores bendiciones y, sin embargo, una de las que menos nos preocupamos por adquirir.