Lasvivencias en esta vidame han enseñado a valorar lo más importante, que no todo mundo tiene y no se puede comprar, como el
amor incondicional d'una
mujer, y ahora que el invierno está tocando a mi puerta, no quiero cerrarla al amor ysi llega y toca será bien venido, con gusto y alegría le abriré para caminar juntosesta travesía.
Yo sé que algún día, alguien me abrasara tan fuerte, que todas esas piezas rotas en mí, se unirán de nuevo.