Me encanta estar al aire libre, disfrutar de una buena comida y pasar el rato con
amigos. Pero sobre todo, disfruto de una gran conversación. Una conversación real, auténtica y mutuamente atractiva. Los monólogos están bien para los presentadores de programas tardíos, pero quiero diálogo, donde ambos nos sintamos escuchados, respetados y vistos. ¡Dame una buena taza de café o una copa de vino y una conversación profunda, divertida y significativa, y seré un campista feliz!
Mi vida es plena y satisfactoria, pero encuentro que extraño a un
hombre amoroso. Extraño el agarre de la mano, los besos, los abrazos, las risas, la cercanía emocional y física. Los abrazos, el romance y el afecto son muy importantes. Listo y dispuesto a explorar la vida.