Me declaro sentimentalmente mortal, piola de corazón, linda de alma, acróbata mental, lunática sin luna, amante de la vida, artista de vocación, de profesión unica, ilusionista,
mujer y PRINCESA. Ancha de mente, de sonrisa traviesa y mirada táctil, sensible a lo inexistente, nunca sencilla, siempre complicada, feliz de ser y estar en cualquier momento y lugar, ausente de día, fugaz de noche, volátil en la solidez de un mundo estático, soñadora venida a más, atleta en la carrera de la vida, y para desintoxicar mi alma: "ENTREGADA"