El valor de una
mujer no está en su apariencia, en lo que ella puede hacer, está en su corazón y en su alma, ahí es donde radica su verdadera belleza y eso es lo que la hace especial y vale más que nada en el mundo .
Un verdadero
hombre no busca muchas
mujeres, sino busca a la que lo entienda, no hace triste a muchas damas, hace feliz a la que se encomienda.