Bienvenida a mi humilde morada, si quieres hacer frente a ese estado quellaman soledad, que te pone el zapato en el cuello, y te empuja al olvido y al pozo negro de la indiferencia, coge mi mano y juntos vayamos a descubrir todas las alegrías que, estoy seguro, nos esperan. No busco un rollo de una noche, busco una relación seria y a una
mujer que quiera compartir todos los momentos que la vida nos ofrece.
Gracias por deteneros en leer estas pocas palabras. Un beso